viernes, 27 de junio de 2014

El Papa Francisco ha dicho en la homilía del jueves 27 de junio

El Pontífice ha subrayado que "las multitudes estaban impresionadas: escuchaban a Jesús y el corazón se calentaba; ¡el mensaje de Jesús llegaba al corazón!" Y es que Jesús "se acercaba al pueblo" y "sanaba el corazón del pueblo", entendía las dificultades. Jesús --ha proseguido el Papa-- "no tenía vergüenza de hablar con los pecadores, iba a buscarles", "sentía alegría, le gustaba ir con su pueblo". Y esto sucede porque "Jesús es el Buen Pastor, las ovejas escuchan su voz y lo siguen".

El Pontífice ha indicado que por esto el pueblo seguía a Jesús, porque era el Buen Pastor: "no era ni un fariseo casuístico moralista, ni un saduceo que hacia negocios políticos con los poderosos, ni un guerrillero que buscaba la liberación política de su pueblo, ni un contemplativo del monasterio. ¡Era un pastor! Un pastor que hablaba la lengua de su pueblo, se hacía entender, decía la verdad, las cosas de Dios: ¡no negociaba nunca las cosas de Dios! Pero las decía de tal forma que el pueblo amaba las cosas de Dios. Por esto lo seguían".